“Las hijas de Danao”, un película rodada con objetivos Samyang
“Las hijas de Danao” es el primer largometraje del director de cine y guionista de origen valenciano Fran Kapilla, una película rodada íntegramente con objetivos Samyang y que está recibiendo muy buenas opiniones tanto del público como de la crítica. La preferencia de Kapilla por estas lentes se debe no sólo a sus características y diseño moderno, sino sobre todo a la gran calidad de imagen que ofrecen. El propio Fran nos cuenta en detalle algunos entresijos del rodaje y el porqué de su decisión.
“Recientemente hemos estrenado el largometraje “Las hijas de Danao”, un thriller de acción y misterio que se desarrolla en las calles de París y donde hemos recreado la escenografía de una ópera muy especial: una de las obras menos conocidas y menos representadas de Antonio Salieri. La película cuenta con un elenco actoral de primera calidad con Paco Roma, Fran Millán, Beatriz Rico, Susanna Pauw, Mónica Aragón y el pintor Antonio Montiel. Actualmente está presente en varios festivales de Europa y, aunque es nuestra primera película, está gustando mucho a la crítica especializada en el cine de autor.
Rodar en París fue una maravilla ya que las autoridades francesas nos han ayudado mucho. Sin embargo, antes de rodar necesitábamos un buen equipo de personas y equipo material de calidad. Cuando me puse en contacto con Samyang lo hice porque, después de sopesar todos los productos actuales del mercado, me llamaron mucho la atención tanto el diseño moderno de los objetivos como sus características técnicas. Cuando empezamos a colaborar con Samyang comprobamos la gran calidad de los objetivos e incluso, dentro del equipo, nos íbamos pasando el material de mano en mano para ver cómo, efectivamente, es una mezcla de modernidad en el diseño y una calidad imperecedera.
[inbound_forms id=”1611″ name=”Suscripción Samyang”]Tanto en las aperturas máximas como en todo su rango de diafragma hemos observado una nitidez absoluta. Hay objetivos actuales de marcas modernas en el mercado que, al abrir el diafragma a su número más luminoso, crea ciertos errores cromáticos y una falta de nitidez. Sin embargo, es increíble la calidad que otorgan los objetivos Samyang. Por ejemplo, con el 35 mm 1.4, uno de los que más hemos usado, abierto a 1.4, puedes ver los rasgos más finos perfectamente nítidos y contorneados.
El 85 mm 1.4 lo hemos utilizado para los planos más cerrados, primeros planos, rostros, detalles, etc. La distancia focal que ofrece este objetivo, unido a su luminosidad, crea una increíble sensación de profundidad muy cinematográfica. Es el objetivo perfecto para los rostros: a los actores les encanta porque saben que les filmamos de una manera muy cinematográfica, donde ellos son los que destacan por encima del resto de la escena y fondos desenfocados.
Otro de los elementos más cuidados de los objetivos Samyang son su ergonomía y manipulación. Hay objetivos donde el anillo de enfoque está muy duro o demasiado suelto, o tiene un recorrido demasiado corto. En Samyang, el recorrido del anillo de foco es lo suficientemente largo como para poder enfocar cualquier detalle de la escena. Además, son anillos grandes que casi ocupan medio cuerpo del objetivo, con lo cual puedes manipular con mucho más detalle y seguridad. Por ejemplo, cuando estábamos rodando la persecución de coches, podíamos permitirnos el lujo de abrir bastante la luminosidad de los objetivos y, aunque el campo de nitidez se reduce (por ejemplo con el 14 mm 2.8), podíamos hacer el seguimiento gracias al enorme anillo de la lente gracias a la seguridad que proporciona para poder trabajar con él.
Todos los que nos dedicamos al cine y la fotografía sabemos lo importante que es tener un buen objetivo. Los Samyang lo son por su perfecta construcción de cristales, su buena calidad y resistencia. Para muestra, os cuento una anécdota: estábamos rodando una escena con los actores corriendo y, de repente, se nos cayó la cámara de cine desde una altura de dos metros. Cayó en picado con el 35 mm 1.4, que fue lo que impactó contra el suelo, y el parasol de plástico se partió en dos. Yo creía que se habían roto la cámara y el objetivo, pero encendimos la cámara y todo funcionaba, incluido el Samyang 35mm f1/4. Hasta el día de hoy siguen funcionando y, aunque tuvimos que cambiar el parasol, el filtro protector y limpiarlo mucho, puedo asegurar que un golpe así de brutal no ha supuesto nada para el objetivo.
La resistencia a las temperaturas también es un factor muy importante. Cuando rodamos en París en enero hacía una temperatura de -3 grados centígrados con nieve en la calle, rodajes duros y largos de muchísimas horas de frío. Asimismo, en Málaga en verano hay una temperatura de 38 grados, también con rodajes de muchas horas. Los objetivos Samyang son invulnerables a temperaturas dispares. Entonces es cuando te das cuenta que tener un Samyang es tener un objetivo para toda la vida: una lente luminosa, de gran calidad en su construcción y resistente a los golpes y a las diferentes temperaturas. Estamos seguros que gran parte de la calidad de nuestra película “Las hijas de Danao” ha sido gracias a Samyang.
Samyang ha sido y será nuestra mejor elección: no concibo ningún futuro rodaje con calidad donde no usemos estos objetivos y los próximos que vayan saliendo, porque cada nuevo lanzamiento es una joya. Personalmente, creo que el catálogo de Samyang es una gran opción a tener en cuenta: se trata de cine y he podido comprobar que la calidad es muy superior a otros productos del mercado.”
Fran Kapilla, director de “Las Hijas de Danao”.
[inbound_forms id=”1611″ name=”Suscripción Samyang”]Fran Kapilla se ha dejado conquistar por los objetivos Samyang. ¿Has tenido la oportunidad de probarlos? ¿Qué opinas de ellos? Comparte tu opinión con nosotros.