Método Brenizer, profundidad de campo sorprendentemente baja

• Lourdes Olmedo


• 16 Sep 2016

Seguro que en miles de ocasiones te hubiese gustado trabajar con una profundidad de campo muy baja, mientras intentabas realizar un bokeh que “quitara el sentío“. Pero, al tener que alejarte, se pierde el desenfoque y, al final, el resultado no era lo que esperabas. Hoy te traigo un método que cambiará tu forma de crear fotografías. Podrás conseguir resultados muy creativos y con una profundidad de campo tan baja,  que no podrías haberlo ni imaginado. Hablo del método Brenizer.

A continuación voy a desarrollar ampliamente en qué consiste este método, qué equipo necesitarás, cómo llevarlo a cabo, y cómo montarlo en Photoshop. A primera vista, parece ser un método muy complejo y con demasiados pasos a tener en cuenta. Sin embargo, te adelanto que no es para tanto. Una vez hayas conseguido tus resultados verás como realmente merece la pena ponerlo en práctica.

Método Brenizer, profundidad de campo sorprendentemente baja

1. En qué consiste este método

Pues bien, para poneros en contexto, este método debe su honor al fotógrafo que lo desarrolló. Se trata de Ryan Brenizer, uno de los 10 mejores fotógrafos de bodas del mundo. Lo desarrolló al estar cansado de tener que recortar su profundidad de campo, dejando atrás unos paisajes con efecto bokeh que habrían marcado un antes y un después en sus trabajos. Y eso es precisamente lo que consiguió. Marcar un antes y un después en la profundidad de campo. Trabajaba con objetivos de distancia focal fija de 50 mm y 80 mm para sus retratos, para poder conseguir buenos resultados bokeh. Sin embargo, el espacio negativo (del que puedes conocer más en este post), se veía muy reducido. Tanto, que se perdía la intención minimalista que se pretendía plasmar. Así que decidió hacer un cambio.

Tal y como sabréis aquellos que habéis trabajado con panorámicas o con apilamiento para fotografías macro, con el que os podréis inspirar echándole un vistazo a este post, se puede conseguir una imagen con muchos detalles uniendo diferentes imágenes capturadas en la misma escena. Cuando trabajamos con fotografía macro y nos acercamos mucho a un insecto, por ejemplo, la profundidad de campo se reduce y la zona desenfocada es mayor. Por eso se toman varias fotografías con puntos de enfoque más cerca.

Foto: Josep Caselles Fontanet

¿Qué podrás conseguir con este método?

Sin embargo, el método Brenizer va mucho más allá. No solo conseguirás una imagen con más detalles y mucho más grande (y por lo tanto con más espacio negativo), sino que además podrás simular tener un sensor mucho más grande. O incluso que estás usando una lente angular o que has conseguido un bokeh con un objetivo más largo. El método Brenizer consiste en hacer varias fotografías al mismo espacio positivo o sujeto pero con diferentes puntos de enfoque, para luego combinar todas estas fotografías. No solo será perfecto para trabajar con retratos o fotografías de bodas. También será perfecto para ponerlo en práctica con bodegones, paisajes y escenas urbanas.

Foto: Christian Bille

Lo fantástico de este método es que la calidad de la imagen final será espectacular. Una imagen en alta definición con un gran tamaño. Tus resultados se volverán un verdadero enigma para aquellos que tienen conocimientos de fotografía, porque conseguirás imágenes que no corresponden a los resultados que habrías conseguido con tu equipo. Mientras que será un deleite para el resto de espectadores.

2. Qué equipo necesitarás para conseguir el método Brenizer

En principio se podría decir que puedes conseguirlo con cualquier cámara. Desde una cámara compacta, pasando por una cámara bridge, hasta una cámara DSLR tradicional, ya que el resultado final será igual al que hubieses obtenido con un sensor Full Frame.

En cuanto al objetivo, aquí sí que habrá más requisitos. Y es que, sería ideal trabajar con un objetivo rápido y muy luminoso, porque te permitirán conseguir imágenes nítidas e incluso con efecto bokeh al fondo. Serán perfectos los objetivos con una distancia focal fija de 85 mm o 60 mm o incluso 50 mm. Aunque sinceramente los mejores resultados se conseguirán siempre con un teleobjetivo con un 80 mm o superior y trabajar con aperturas máximas de f/1. Si al final te decides por trabajar con un objetivo angular, ten en cuenta el viñeteo que puede aparecer en los bordes. Elimínalo usando Lightroom.

Además, será fundamental agregar a tu equipo de trabajo un trípode. Piensa que vas a disparar un número de veces muy elevado y es fundamental que siempre se dispare en la misma dirección y posición. La cámara deberá quedarse en el mismo punto constantemente, para conseguir plasmar toda la escena con exactitud.

3. Cómo poner en práctica el método Brenizer

Si finalmente te has convencido y te encantaría conseguir una profundidad de campo mucho más amplía y desenfocada de lo que tu equipo es capaz de conseguir, deberás de poner en práctica estas premisas. Y sí, deberás cumplirlas a rajatabla. Estamos hablando de un montón de fotografías que acto seguido deberemos unir. Por ello, cualquier fallo en esta fase, puede fastidiar todo un día de trabajo. Y eso, precisamente, es lo que menos nos apetece.

Escenas simples

La primera vez que intentes poner en práctica el método Brenizer, es mejor que empieces trabajando con una escena sencilla. Busca un paisaje con el que puedas intuir que quedaría mejor una profundidad de campo mucho más baja de lo que cabría esperar. A medida que tengas más práctica y hayas perfeccionado tu técnica podrás ser mucho más original y poner tu imaginación en marcha hasta que nos dejes a todos de piedra.

Foto: Peter Lindgren

Formato fotográfico

Aunque te parezca raro lo que voy a decir a continuación, no me he vuelto loca. NO dispares con formato RAW. A pesar de ser el formato que más calidad aporta a nuestras fotografías, es también el formato que más pesa y, si tenemos en cuenta que nuestra imagen la van a formar un montón de fotografías, el peso sería enorme. Mucho más si queremos unificarlas posteriormente con Photoshop. No perderás información y detalles porque para eso hacemos muchas fotografías.

Máxima apertura permitida

Como te adelantaba en el punto anterior, es mejor trabajar con la apertura máxima que te permita tu equipo (menor número f), pues conseguirás mejores resultados, mayor luminosidad y mayor nitidez. Debes dejarlo en modo manual, para que mantenga constante a lo largo de este proceso creativo.

Balance de blancos

Piensa que si lo dejas en automático, cada fotografía que realices tendrán una exposición de color muy diferente. De modo que, al unir estas fotografías, no se conseguiría un buen resultado final. Así que ponlo en modo manual y déjalo constante para conseguir la misma temperatura de color siempre.

Velocidad de disparo

Al igual que las dos premisas anteriores, es necesario que permanezca en el modo manual, para que así permanezca constante en todas las fotografías que realicemos. Así conservaremos exactamente la misma luminosidad.

Foto: Peter Lindgren

Sensibilidad

Déjala en el menor valor posible para que puedas evitar la aparición de ruido en tu imagen. Suele aparecer en los bordes, así que ten cuidado con eso.

Enfoque

Si dejases el modo de enfoque automático, vuelvo a insistir, se modificaría constantemente la profundidad de campo de la escena. Por lo que las fotografías que consiguieras no podrían unirse unas con otras, no tendrían sentido alguno. Así que enfoca la primera vez a tu espacio positivo o sujeto y déjalo en modo manual, para que lo conserves y trabajes siempre con la misma profundidad de campo.

Espacio positivo o sujeto

Si vas a trabajar con personas debes tener en cuenta que estos deben permanecer en la misma posición en todo momento. Imagina que lo que estamos haciendo es un mosaico y, por ello, todas la piezas deben encajar posteriormente. Nuestra imagen se creará alrededor de nuestro modelo por lo que debemos tenerlo en cuenta en todo momento.

Foto: Quin West

Fotografías

Haz todas las fotografías que puedas y necesites. Este conjunto de imágenes deben dar lugar a una nueva y no queremos que se queden detalles o información atrás. Por eso debes barrer toda la imagen, que no queden espacios, para poder construir una buena fotografía final. Es recomendable empezar por el centro de la escena que será donde se encuentre nuestro espacio positivo. Y, una vez hayamos capturado toda la información referente a este, pasaremos al espacio negativo, pudiendo recopilar toda la información que necesites.

4. Cómo montar nuestras fotografías en Photoshop

Y con esto llega el último paso. Una vez hemos capturado todas las fotografías de la escena siguiendo los parámetros que te he comentado anteriormente, solo queda unificarlos con un programa de edición, en este caso usaremos Photoshop.

En primer lugar colocaremos todas nuestras imágenes en capas diferentes para poder trabajar con ellas de un modo mucho más sencillo. Así que, pincha en “Archivo”, “Scripts” y por último “montar archivos en pila”. Nos aparecerá una ventana, selecciona la pestaña “Buscar” y busca (valga la redundancia) todas tus imágenes, selecciónalas y pulsa “Ok”. Hasta aquí espero que vayas bien.

En principio ya tendríamos un documento montado. Ahora solo tendríamos que alinear todas las capas para conseguir la imagen que desde un principio teníamos en mente.

Ahora selecciona todas las capas que acabamos de crear y pincha en la pestaña “Edición”. Seguido de “Auto-Align Layers”. Para mí, el método de Re-posición, es el que mejores resultados ofrece. Pero podrás probar todas las opciones por si alguna obtuviese unos resultados que se acerquen más al resultado que querías conseguir.

Una vez tengas todas tus imágenes montadas, pincha en la opción “Auto-Blend Layers”. Cómo podrás observar a estas alturas, tu imagen ya ha cogido forma. Solo tendrás que recortar aquellos detalles e información de la escena que no necesitas y ultimar algunos detalles de edición que dejo en tus propias manos.

¡Y nada más! Por fin tendrías una imagen como resultado del método Brenizer y con una profundidad de campo realmente baja. Parecerá que hayas hecho tus fotografías con una lente angular pero con muy poca profundidad de campo. Justo el objetivo que se quería conseguir.

Foto: Quin West

Conclusión

Una vez has procesado todos los consejos que he desarrollado a lo largo de este post, podrás imaginar que al final no era tan complejo como en principio parecía. De hecho será muy sencillo de conseguir. Por eso no querrás, ni podrás dejar de ponerlo en práctica siempre que trabajes con tu equipo. Lo único en lo que puede que tardes un poco más es en hacer las fotografías que compondrán la imagen final. Pero, teniendo en cuenta que es nuestra pasión, me arriesgo a afirmar, que no será un problema para ti. Atrévete y publica tus resultados en nuestras redes sociales, estoy deseando echarles un vistazo.