Cómo hacer fotografía de deportes: preparación y estilo

La fotografía de deportes es una disciplina exigente y para afrontarla con garantías es necesaria una correcta y concienzuda preparación, tanto técnica como de estilo. En un primer post explicamos cómo enfocar una sesión de fotografía deportiva desde un punto de vista más técnico, definiendo las condiciones habituales que nos encontramos en esta clase de eventos, el equipo fotográfico más idóneo a llevar y la configuración de nuestro equipo. En esta nueva entrada, nos centraremos más en la parte estética y de preparación previa a la sesión, con el objetivo de tener bajo control la mayor cantidad de elementos y lograr así superar la sesión con éxito.

Preparando la sesión de fotografía de deportes: antes de disparar

Ok, tenemos claro que vamos a cubrir un evento deportivo. Puede ser el partido de fútbol de nuestro hijo, un amigo que nos ha pedido que cubramos un torneo de baloncesto para tener imágenes para la web, o simplemente que nos guste el mundo del motor y queramos tener imágenes potentes de una carrera de motos. Sea cual sea el punto de arranque, una vez aceptamos el encargo habrá que dar una serie de pasos que nos ayudarán a obtener las mejores imágenes posibles. A continuación listamos algunos consejos a tener en cuenta mucho antes de empezar a disparar.

1. Conoce tu equipo fotográfico… y define la sesión

Repetido hasta la saciedad, pero una gran verdad y aplicable a cualquier tipo de fotografía, pero especialmente relevante en la fotografía de deportes. Si dominas tu equipo, sabrás todo lo que puede ofrecerte, sus límites de trabajo y, por lo tanto, qué fotografías puedes tomar con una calidad aceptable y cuáles se te escapan.

Significa que tengo que conocer los menús y opciones que me da la cámara pero también que debo saber cómo responde a situaciones extremas: hasta qué ISO puedo disparar con un ruido aceptable, cuántas fotos puedo disparar en ráfaga y cuánto tiempo tarda el búfer en actualizarse, cuántos pasos puedo sobreexponer una foto sin llegar a quemarla, cuál es la mínima velocidad a la que puedo disparar “a pulso” o con un monopie sin que la trepidación sea un problema, cuánto tarda en enfocar, en qué situaciones le cuesta o cómo hacerlo de manera rápida.

En definitiva, una serie de cuestiones que se responden practicando y poniéndolo a prueba. Evidentemente, se puede practicar durante la propia sesión, pero en fotografía de deportes eso significará perder seguro algunas fotografías.

Foto: Skitterphoto en Pexels

Una vez sé lo que mi equipo puede hacer por mí, podré definir qué fotografías quiero realizar en la sesión de manera coherente y disminuiré la frustración por no poder obtener según qué tipo de imágenes. Así, si no tengo un tele suficientemente luminoso quizás deberé minimizar los primeros planos a aquellos momentos en que los jugadores estén realmente cerca y cuando no sea así centrarme más en fotografías más abiertas para captar el ambiente de un partido, los encontronazos con los rivales, etc.

El objetivo: sacar el máximo rendimiento a mi equipo, de manera que tenga las mejores fotografías posibles, que seguro que me dejarán satisfecho.

2. Revisa tu equipo fotográfico antes de hacer fotografía de deportes

Es un consejo obvio, pero debe aparecer. Es importante que no te dejes nada en casa que puedas necesitar durante la sesión. ¿Qué objetivos vas a usar? ¿Tienes suficientes baterías y están totalmente cargadas? ¿Las tarjetas están vacías y listas para su uso? De hecho, no está de más hacerse un checklist para así asegurar que no nos dejamos nada olvidado.

Por otro lado, en el post anterior ya dimos respuesta a alguna de estas preguntas y a cuál es el equipo más aconsejable para las sesiones de fotografía de deportes, pero cada fotógrafo debe hacer su propio análisis y responder en base al equipo que tiene y al tipo de fotos que quiera tomar.

3. Conoce el lugar y prepara los encuadres y composiciones con tiempo antes de la sesión

Llega con tiempo de sobra antes de que empiece la competición. Es importante que tengas margen para explorar el área y así analizar dónde te convendrá más colocarte para hacer cada tipo de fotografía que tengas en mente. Intenta visualizar cómo serán las fotos que se obtengan en cada lugar, a qué distancia quedarán los protagonistas, qué configuración en la cámara utilizarás, etc.

También puedes aprovechar estos instantes de calma para encontrar fotos diferentes y más creativas que podrás ejecutar cuando la actividad deportiva arranque. Presta atención y aprovecha posibles elementos y estructuras del lugar, busca puntos de vista originales, integra el entorno. Hacerlo antes del evento, con toda la tranquilidad del mundo, seguramente te permitirá descubrir/pensar en opciones que difícilmente aparecerán cuando estés en el fragor de la sesión y que enriquecerán mucho tu serie y le darán un toque especial.

Foto: Michal Jarmoluk en Pixabay

4. Mide la luz en tus fotografías de deportes

Otro motivo clave para llegar con tiempo de sobra a las instalaciones deportivas es tener margen para realizar las mediciones pertinentes de luz. Así podrás ver en qué valores apertura-velocidad-ISO tendrás que moverte. Si quieres aprender a medir la luz en tus fotografías, no te pierdas este artículo.

Es conveniente hacer mediciones en diferentes puntos para comprobar si la luz es homogénea en toda la zona en que vas a tomar fotografías, o si por lo contrario ésta varía.

Si la sesión es en exterior, ten en cuenta que las sombras pueden ser mucho más oscuras que las zonas soleadas. Además, si el protagonista está a contraluz o el sol le da de pleno, la exposición correcta puede variar de manera apreciable. Estos momentos antes del evento son perfectos para estimar todos estos elementos y decidir, de nuevo con mucha más calma, la mejor solución.

Por ejemplo, en eventos deportivos en exterior con luz del sol, suele ser necesario sobreexponer la imagen unos 2/3 EV cuando el protagonista está a contraluz (o incluso más si el sol está bajo) o subexponerlo unos 2/3 si el sol le toca de lleno. De todos modos, estos valores son orientativos y lo correcto es comprobarlos y medirlos “in situ”, en el terreno de competición.

Foto: Abigail Keenan en Unsplash

5. Conoce el deporte… y los deportistas

Conocer bien el deporte que vas a fotografiar te va a ayudar mucho a tomar las mejores fotografías. Te va a permitir anticiparte a la acción o incluso decidir cómo tomar una fotografía porque ya sabes de antemano qué ocurrirá. Por ejemplo, en fútbol, cuando se da un saque de esquina tenemos claro que seguramente va a haber mucha acción e interesante en el área pequeña, así que puede ser inteligente preenfocar en esa zona y tener la ráfaga lista para disparar en el momento en que el balón se acerque a los jugadores que lo están esperando.

Conocer el deporte también incluye a conocer a los deportistas. Si vamos al baloncesto de élite, en algunos casos sabremos qué jugador tiene todos los números para jugarse el balón decisivo que resuelva el partido. Ahí estará claro a quién hay que seguir aunque sea con un solo ojo mientras el otro ojo sigue el balón.

Durante la sesión de fotografía de deportes: aspectos a tener en cuenta

Una vez empieza el evento deportivo, hay que sacar tu genio de fotógrafo y dejarte llevar por la acción pero aprovechando al máximo los preparativos que hemos realizado para la sesión. A continuación algunos aspectos que conviene tener en cuenta durante una sesión de fotografía de deportes.

1. Controla la zona de competición… y fuera de ella

Durante el evento deportivo, ya sea un deporte de balón, atletismo, motor… es necesario estar muy atento a lo que ocurre en la zona de competición. Debes saberlo, siempre se te van a escapar fotos que sientas que eran la foto del partido, pero el estar concentrado te va a ayudar a minimizar su número.

Además, a parte de la concentración en la zona en que se desarrolla la actividad deportiva es interesante tener un ojo puesto en lo que ocurre en los alrededores, entre el público, en la zona de boxes, en el banquillo… Ahí también hay acción y pueden haber instantes muy interesantes para capturar, o, como mínimo, para lograr un fotorreportaje más global. No es sencillo verlo todo, pero el intentarlo hace que estés más cerca.

2. No mires (continuamente) la pantalla LCD

Tiene que ver con el consejo anterior, pero lo dejamos aparte para resaltarlo. Los estadounidenses incluso tienen una palabra para ello: chimping. Se trata de la acción de mirar a la pantalla LCD de la cámara. Si bien es inevitable hacerlo de vez en cuando para comprobar que las fotografías van saliendo como queremos o ajustar los parámetros, mirar a menudo las fotos que tomamos es contraproducente.

Como ya hemos dicho, las acciones son rápidas e irrepetibles. Estar mirando la pantalla de nuestra cámara es no seguir la acción, y ahí podemos perder un momento clave: un gol, un encontronazo, un coche saliendo de pista… o incluso, y más grave, un balón saliendo del campo de juego y dirigiéndose furioso a nuestra cabeza o nuestra cámara.

3. Fotografía de deportes desde un punto bajo

Para potenciar nuestras fotografías estéticamente, ayuda el fotografiar desde un punto de vista bajo. Da mayor relevancia al deportista, lo engrandece, permite capturar mayor porción de suelo respecto al cielo… En general, es bastante habitual ver a los fotógrafos profesionales de rodillas, agachados… Si ellos lo hacen, ¡por algo será!

Foto: William Warby en Flickr

4. Mejor sin flash

En competiciones de primer nivel, directamente está prohibido disparar con flash en la cámara, para no molestar a los deportistas. Además, al estar los protagonistas a distancias lejanas del fotógrafo, es muy factible que los flashes de zapata habituales no tengan potencia suficiente para iluminarlos o, como mínimo, que pierdas parte importante de la luz ambiente. En categorías inferiores quizás no existe la prohibición pero sí sigue molestando a los deportistas, por lo que no esperes utilizar demasiado el flash.

Aunque no es estrictamente fotografía de deportes, sí puede haber situaciones en que el flash sirva creativamente, como por ejemplo en sesiones preparadas de mountain bike o skates saltando.

5. Enfoque disociado y preenfoque, complementos del disparo en ráfaga

Por defecto, normalmente al apretar el botón de disparo de nuestra cámara hasta la mitad, ésta enfoca. Pero muchas cámaras permiten un enfoque disociado, es decir, que el botón de enfoque y disparo sean distintos. Utilizar esta opción en fotografía de deportes es especialmente interesante ya que me permite preenfocar una zona hacia la que espero que se dirigirá la acción, seguir más fácilmente el juego sin mirar por la cámara pero manteniendo apretado el botón de enfoque y finalmente cuando vea que los deportistas están en la zona de interés, solo encuadrar y disparar, todo ello de manera muy rápida, ágil y sin perder el enfoque.

Si trabajo manteniendo el botón de disparo apretado hasta la mitad es sencillo que, o bien lo apriete del todo en un despiste (y se dispare la cámara) o deje de apretar (y pierda el enfoque). Un ejemplo de este uso puede darse en salto de altura, en atletismo. Para captar esta prueba, puedo preenfocar la zona de salto en el listón, con una profundidad de campo algo holgada. Mantengo apretado el botón disociado de enfoque y sigo entonces a la atleta en su carrera para ganar impulso. Una vez inicia los pasos para dar el salto, puedo disparar en ráfaga y tendré la secuencia completa de todo el salto, con el momento clave sobre el listón perfectamente enfocado.

Foto: Steven Pisano en Flickr

6. Vigila el encuadre en fotografía de deportes: horizonte derecho, sujeto dentro sin ser cortado

A menudo nos centramos en el jugador de turno y nos olvidamos del resto de la imagen, como por ejemplo, del horizonte. Atención, un horizonte inclinado llama mucho la atención y desequilibra la imagen. Intenta controlar que el horizonte siempre esté horizontal. Obvio, ¿verdad? Pues no es sencillo y puede ser útil el siguiente consejo para corregir pequeña desviaciones.

7. Ante la duda, encuadra ancho (relativamente) y recorta

A no ser que tengas que entregar las fotos en unas horas, puede ser inteligente ser más generoso de la cuenta con el encuadre. En las sesiones deportivas los protagonistas están en continuo movimiento y, a menudo impredecible trayectoria. Así que puede ser difícil cuadrar el encuadre deseado o no desmembrar jugadores, dejándolos sin cabeza o brazos.

Por lo tanto, y dado que las cámaras actuales van bastante sobradas en resolución, vale la pena coger más área de la que realmente tengo en mente y recortar y enderezar en la edición posterior. Con la práctica seguramente iremos ajustando el encuadre y nos será más sencillo dejar la foto (casi) perfecta a la primera, pero mientras tanto, este consejo ayuda. Eso sí, no se trata de desechar media foto. En mi caso, intento que un recorte nunca supere el 10-20% de la imagen original.

Foto: Jamie Manktelow en Flickr

Estilo de fotos: consejos creativos en fotografía de deportes

Hemos comentado cómo preparar la sesión de fotografía de deportes, cómo actuar durante ella y no podemos terminar esta entrada sin dar algún apunte sobre lo más importante de la sesión, el contenido de las imágenes: qué suele funcionar mejor y algunos aspectos a los que prestar atención. A partir de aquí, la creatividad es tuya y decidir qué quieres explicar y cómo, tu elección y marca.

1. El protagonista manda

Está claro, en este tipo de eventos los deportistas, motos, etc. son los auténticos reyes y deben ser protagonistas indiscutibles en un número elevado de fotografías. Al espectador de estas fotografías le suele gustar ver imágenes con un encuadre cerrado de dichos protagonistas y que les muestre con detalle aspectos que durante el juego o carrera son difíciles de apreciar por la distancia o la velocidad de las acciones. Este tipo de fotografías incluyen primeros planos, de medio cuerpo o entero, con elevada nitidez y el sujeto “congelado”.

2. Busca las expresiones de los deportistas

Dentro de las fotografías que más interés suelen generar encontramos aquellas imágenes que transmiten una emoción o reacción del deportista: la alegría tras anotar la canasta de la victoria, la desesperación de encajar un gol, rabia, sorpresa… Se trata de instantes que explican mucho del deportista y que nos acercan a su lado más humano. Y como también somos humanos, eso nos conecta con la imagen y nos la fija en la retina.

3. Capta los momentos decisivos en fotografía de deportes

Todo aficionado al deporte tiene en mente la fotografía de Maradona anotando un gol con la mano ante Inglaterra en la final de Mexico’86 (“la mano de Dios”). O la imagen de Mike Tyson mordiendo la oreja de Holyfield en la final de pesos pesados de boxeo. Son imágenes que lograron capturar el momento decisivo del juego, un poco antes o después no tendrían la mitad de valor. Estos ejemplos se pueden trasladar a cualquier nivel de competición. Siempre habrá algunos instantes que decidan el partido o que sean relevantes y queden grabados en la memoria del espectador. Si logras capturarlos, habrás tenido éxito en tu sesión.

Foto: AJ Guel en Flickr

4. Fotografía el entorno para situar la acción

Pero claro, no todo son primeros planos o fotos de los deportistas si lo que buscamos es un fotorreportaje del evento. Una serie se entiende como una secuencia de fotos que están relacionadas entre sí y nos explica cómo fue el evento. Por lo tanto es importante situar la acción, dónde ocurre. Aquí podemos aprovechar los instantes antes del evento para tomar fotografías generales del estadio, pabellón, circuito e irnos acercando, presentando la pista de juego, etc.

5. Capta el ambiente

Relacionado con el punto anterior, es interesante captar también el ambiente que se respira y tomar fotografías antes de que arranque el espectáculo: de las aficiones, de la animación en el campo, de elementos curiosos y característicos que se puedan dar… También durante y al final del evento deportivo no debes perder de vista la grada y tomar algunas imágenes para captar la reacción del público, de los banquillos… especialmente si se da algún suceso especial o digno de ser captado.

Foto: Riccardo en Pexels

6. Busca encuadres diferentes en fotografía de deportes

Lo mejor es empezar por lo sencillo, solvente y que funciona. Pero una vez ya he hecho 30 barridos de coches pasando delante de mí, o 220 fotografías directas de jugadores de cuerpo entero chutando el balón… quizás es la hora de empezar a buscar fotos más diferentes y originales, tal vez incluyendo algún elemento del entorno, fotografiando deportistas que no estén en el centro de la acción… o simplemente no fotografiando la escena completa sino sólo detalles de ella.

Si lo que hacemos es una serie de fotografías, una vez introducido el tema, el espectador no necesita ver la globalidad de la escena cada vez para ubicarse. Solo mostrando partes de la misma ya puede entender de qué se trata y como fotógrafo llevo la atención a elementos concretos.

Otro ejemplo claro es variar el ángulo o punto de vista, buscando una imagen más impactante. Quizás existe alguna plataforma, o punto elevado que me permita ver el partido o la carrera desde una visión cenital. Las fotografías resultantes seguro que serán impactantes, aunque sólo sea por el punto de vista poco frecuente. O tal vez tienes la oportunidad de fotografiar un tiempo muerto en baloncesto con un gran angular en contrapicado a los jugadores. Es cuestión de estar atentos y arriesgar, o aprovechar el trabajo que ya hayamos hecho durante la preparación de la sesión.

Foto: Rene Hofstetter en Pexels

Conclusiones finales sobre la fotografía de deportes

En este post hemos detallado una lista bastante extensa de recomendaciones para preparar y ejecutar una sesión de fotografía de deportes de la mejor manera, así como qué imágenes suelen ser más potentes en un fotorreportaje de este tipo. Al final, todo se resume en tener claro el tipo de imágenes queremos captar y llevar, dentro de lo disponible, el equipo más adecuado para ello.

Además, es muy interesante el llegar con tiempo al lugar del evento para poder conocer el entorno, decidir qué tomas realizar, medir la luz, etc. Durante la sesión, habrá que estar concentrado en la acción e incluso anticiparse a ella para lograr las imágenes más impactantes o los momentos decisivos.

Si lo que queremos es un reportaje global, no debemos olvidarnos de incluir también en la serie fotografías del entorno y del ambiente antes y después del evento. Y como siempre, éstos son los consejos “políticamente correctos”. A partir de aquí, la imaginación y creatividad son tuyos para lograr imágenes no tan comunes pero quizás más impactantes por poco vistas. ¿Por qué no una serie de fotografías en un partido de fútbol buscando captar el movimiento de los jugadores disparando a velocidades bajas?

Os invitamos a que nos dejéis vuestras experiencias en este tipo de fotografía y también cualquier otro consejo que echéis en falta.

Foto destacada: Thomas Borges