La fotografía se practica mejor… ¿solo o acompañado?

Muchas veces salimos a hacer fotos cual manada de lobos, en grupo, bien acompañados y al compás. Aunque somos los primeros que disfrutamos de compartir la fotografía, hay que decir que en cierto modo dificulta el desarrollo del fotógrafo. Al menos, en ocasiones, sí. ¿En qué medida y por qué? ¿Qué es “mejor” entonces, hacer fotos solo o acompañado? Antes de posicionarnos veamos las ventajas de elegir la individualidad y las ventajas de elegir el sentimiento grupal cuando salimos a hacer fotografías.

Ventajas de hacer fotos en grupo

Aunque hemos empezado la introducción diciendo que hacer fotos en grupo puede dificultar el desarrollo del fotógrafo, no menospreciemos de partida salir a fotografiar acompañado, ya que tiene también muchos puntos a favor 😉

• Aprendizaje: si tenemos cualquier duda siempre podemos preguntarle al compañero. ¿Oye, esto cómo era? ¿Esto cómo se hacía? Suele pasar que en todo grupo está el “fotógrafo alfa”, que más que persona parece una enciclopedia andante. Con lo cual puedes aprovecharte de eso para aprender más mientras haces fotos y lo pasas genial.

• Modelaje: ese momento en que ves el encuadre perfecto, la luz perfecta… pero te falta el personaje. Pero nada oye, ¡que no pasa nadie! ¡Ah! ¡Espera! “Fulanito ven, pasa por ahí un momento, ponte así o asá, mira hacia aquí o hacia allá” y voilà. Has conseguido tu foto perfecta. ¿No ha estado mal tener a alguien, verdad?

• Ayudantes: no solo pueden posar para ti si no que pueden ayudarte en las más variopintas tareas, como abanicar el pelo de una persona, mover una rama, tirar una piedra al mar… Cualquier elemento que deba ser alterado para crear el efecto que buscas en tu foto puede ser conseguido gracias a ellos. Otro gallo cantaría si estuvieses solo.

• Diversión: no podemos olvidar que somos animales sociales y al fin y al cabo nos encanta relacionarnos (cada uno a su manera y en su momento). Cuando practicamos un hobby que nos gusta solemos disfrutarlo el doble si lo estamos compartiendo, por eso salir a hacer fotos en grupo tiene un gran componente de diversión que a muchos les encanta (¡y con razón!).

Ventajas de salir a hacer fotos totalmente solo

Como hemos visto hacer fotos tiene un componente lúdico y social pero también lleva consigo un componente personal e íntimo muy fuerte, por lo que salir en grupo a practicar fotografía tiene también unas serias desventajas, que son las que nos llevan a concluir cuáles son las ventajas de fotografiar solo.

• Concentración: cuando uno sale a hacer fotos debe estar concentrado solo en eso, o no estar concentrado. Me explico. Para conseguir buenas fotos se necesita una curiosa dualidad, por un lado está concentrarse respecto a la cámara y el ojo fotográfico (pensar en los colores, la composición, la luz…), mientras que también necesitamos relajarnos y desconectar para apreciar lo que pasa frente a nosotros (darnos cuenta de las cosas). Digamos que “desconectar”, en cierto modo, significa conectar con el entorno.

• Discreción: no es lo mismo ir con un elenco de fotógrafos tras de ti, enfundados hasta arriba con trípodes y mochilas, que ir tú solo. No por nada, si no por el susto que se lleva el que os ve aparecer. Por eso cuando uno va solo también es más fácil conseguir ciertas fotos. Si vamos a hacer, por ejemplo, street photography y no queremos llamar la atención para que la gente actúe con naturalidad, es mucho mejor que estés solo que acompañado por un gran grupo de personas. Obvio, ¿verdad?

• Superación: por otro lado, sobre todo cuando realizamos reportajes fotográficos fuera de nuestra zona de confort (otro país, otra cultura o simplemente otro barrio que dista de lo que estamos acostumbrados), es muy favorable ir solos porque nos obliga a tener que interactuar con los demás. Normalmente esa interacción con el nuevo entorno y sus personajes solo trae cosas favorables para el reportaje fotográfico en cuestión.

Entonces, ¿hacer fotos solo o acompañado?

Como casi todo, cada opción tiene sus ventajas y sus desventajas, tal y como ya hemos visto. ¿Cuál gana? Supongo que, especialmente en este caso que nos acoge, es una decisión muy personal y que también depende de cada momento y del tipo de proyecto fotográfico del que estemos hablando.

Nos gustaría que nos contases si tienes una clara preferencia, si ves alguna ventaja o desventaja que se nos haya pasado por alto o alguna increíble anécdota relacionada precisamente con salir solo o acompañado. Si solo hablamos nosotros, esto se convierte en un monólogo 😛 ¡Puedes dejar un comentario justo debajo! Nosotros u otros lectores podemos contestarte luego y así pueden surgir mejores análisis.

Entonces, ¿tú qué prefieres? ¿Hacer fotos solo o acompañado?

Foto de portada: Gregg Porteous