Cómo hacer fotos de viaje sin que parezcan una postal

Pasar unos días en una ciudad turística con iconos mundialmente reconocidos y volver con las fotos correspondientes pero que no se parezcan a las de millones de imágenes que otros turistas han plasmado antes es un reto difícil pero estimulante por sí mismo. Nueva York, París, Berlín, etc. son destinos en los que no puedes dejar de fotografiar sus lugares emblemáticos. Pero nosotros somos fotógrafos, más que turistas, y nos debemos un plus de esfuerzo para intentar sacar nuestra propia visión y obtener fotos de viaje únicas.

Cómo hacer fotos de viaje sin que parezcan una postal

Para aprender a hacer fotos de viaje sin que parezcan una postal vamos a hacer este ejercicio con tres ciudades europeas, que además son de las más visitadas por los españoles: París, Ámsterdam y Bruselas.

París

No hay nadie que no asocie París con su inseparable Torre Eiffel. Curiosamente muy criticada en un principio por los artistas de la época. Pero hoy en día sigue siendo el monumento más visitado del mundo con más de 7 millones de visitantes al año. Vale, ¿cuántas fotografías entonces? Mejor no pensarlo, vamos a coger la cámara y a ver qué pasa.

Los mejores compañeros de viaje son los objetivos Irix gran angular, ¡son super luminosos!

Si no puedes con tu “enemigo”, aléjate de él. Eso es lo que decidí yo. No había que incluir la Torre Eiffel totalmente en el encuadre, pues todo el mundo automáticamente al reconocerla en la lejanía, ”completa” el resto. Y, sin embargo, me sirvió para contar algo más de la ciudad: la tradición del quiosco de crêpes, el clima no siempre bueno de la capital y sus gentes (que no turistas).

Eso sí, para conseguir una foto como ésta, necesitarás la mejor estabilidad, así que llévate un buen trípode.

Aquí la solución fue la contraria: a escasos veinte metros de la larga cola de turistas para subir, encontré la imagen del ascensor entre el entramado de vigas de hierro. Casi mejor no pensar que vas a compartir apenas 2 metros cuadrados con una veintena de personas para elevarte a 300 metros de altura. Quizá por eso quise inmortalizar la única parte móvil de este gigante de hierro.

Ámsterdam

En contraposición a París, Ámsterdam no tiene un elemento que destaque notablemente sobre el resto: los canales, las bicicletas, los tulipanes… Y yo añadiría otro, el tranvía. Todo eso es lo que representa a la ciudad. Bicicletas y canales, y siempre desde el puente, es la foto que todo el mundo quiere conseguir. Los turistas se molestan unos a otros por hacerla.

Como siempre variar el punto de vista es una buena idea, además de elegir la luz adecuada (esto es siempre lo más importante).

En vez de hacer la fotografía desde el puente bajé al canal. Desde allí, y aprovechando la primera hora de la mañana, conseguí el canal con sus arcos, las bicicletas, los típicos edificios al fondo y en primer plano las barcas.

Utiliza largos tiempos de exposición sin tener miedo a quemar tu imagen (y crea el efecto sedoso sobre el agua, por ejemplo) gracias al filtro de densidad neutra variable ND2-ND400 Gloxy:

Siempre ponerse al lado contrario donde está todo el mundo o variar el punto de mira son buenas ideas para conseguir imágenes menos convencionales.

Bruselas

Bruselas se divide entre dos sus lugares mas emblemáticos: La Grand Place y el Atomium, porque el Mannequen Pis, en fin, es mejor ni nombrarlo. La Grand Place pasa por ser la plaza más bonita de Europa y en verdad puede que sea así. Sobre todo el edificio del Ayuntamiento donde destaca su torre más alta y esbelta que se divisa casi desde cualquier punto de la ciudad.

En esta toma se distingue la famosa torre y además añado los típicos tejados de las casas bruselenses, y la suerte de que empezara a nevar le añade el aroma invernal a la toma.

El Atomium es la otra atracción más visitada en Bruselas. Se construyó en 1958 para la exposición universal. Aquí lo típico es ponerse delante con las manos abiertas para dar la impresión que lo estas tomando en tus manos. Ya que se han tomado el trabajo de ampliar un cristal de hierro 165 mil millones de veces, vamos a aprovecharlo y hacer las fotos desde dentro. Así apreciamos los materiales que se emplearon, la estructura desde cerca y al fondo gran parte de la ciudad de Bruselas.

Cuenta siempre con la mejor estabilidad:

Conclusiones finales sobre fotos de viaje

Bueno, ya hemos terminado nuestro ejercicio. No sé si las fotos de viaje conseguidas serán mejores o no que las tradicionales, pero lo que sí podemos asegurar es que habrá menos posibilidades de que se parezcan a las de nuestro cuñado que también le da a esto de las fotos. Salirse del camino fácil no solo es cuestión de los resultados sino de las experiencias siempre diferentes que se van guardando y que harán que nuestro próximo reto cuente con más herramientas para su elaboración. Si tú eres de los afortunados que comienzan sus vacaciones en breve, sigue mis consejos o no. Pero aprovecha y disfruta de tu afición en un tiempo en el que la mente es más propicia para crear.

Fotos: © Juan Miguel Cervera.