Cada vez existen más opciones para grabar y fotografiar bajo el mar, y por eso la experiencia de buceo no está completa sin un material gráfico que llevarse a casa. Sobre todo cuando se viaja a lugares tan espectaculares como Isla Tortuga (Tailandia), un destino muy popular para la práctica del submarinismo por sus aguas cristalinas y sus llamativos fondos marinos.
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Entre todas estas alternativas, destaca la marca de carcasas submarinas Seashell gracias a su variedad de modelos disponibles (con hasta 800 referencias de cámaras compactas y smartphones) y, sobre todo, por excelente relación calidad/precio. Con estas carcasas puedes transformar tu móvil o tu cámara de fotos doméstica en una auténtica cámara sumergible sin tener que invertir mucho dinero, como hizo este usuario de Seashell SS-G durante sus vacaciones el pasado mes de mayo en Tailandia.
La carcasa Seashell SS-G ha sido específicamente diseñada para Samsung Galaxy S4 o S3, convirtiendo el smartphone en una cámara todoterreno con la que poder grabar y hacer fotos espectaculares en situaciones que antes eran inimaginables. Está fabricada en polipropileno para resistir las condiciones más duras inmersión, como profundidades de hasta 40m y temperaturas desde -10ºC hasta 60ºC.
Pero lo que diferencia la carcasa Seashell de las demás es que es la única con la que puedes cambiar de modo foto a vídeo, visualizar y seguir grabando… ¡sin tener que salir del agua! Gracias a sus cuatro botones externos se puede acceder a las funciones del Smartphone e incluso compartir esas imágenes y vídeos en las redes sociales.
La gama Seashell incluye modelos para iPhone, Samsung Galaxy y cámaras compactas en varios colores. ¡Encuentra el tuyo y guarda recuerdos inolvidables este verano!