Irix 21mm f/1.4: Primeras Impresiones

Como ya sabéis, llevo muchos años confiando en Irix y en sus magníficos objetivos. Una vez más, lo han vuelto a hacer. Han sacado al mercado un objetivo con unas características ideales que se adaptan a la perfección a las necesidades de cualquier fotógrafo: El nuevo Irix 21mm f/1.4. Cuando supe de su lanzamiento y conociendo la calidad de una marca como Irix, no dudé un solo segundo en que debía formar parte de mi equipo. Especialmente porque quería cubrir un pequeño hueco en mi mochila, pero de esto ya os hablaré más adelante.

Poder contar con una apertura de f/1.4 permite jugar a minimizar la profundidad de campo

Vamos a analizar las características de la lente y sus usos. Vamos a ir por orden. Primero describiremos sus características, y después veremos por qué éstas son ideales para cubrir las necesidades de muchos amantes de la fotografía. Iré añadiendo algunas fotos y algunas primeras impresiones que he ido percibiendo en este mes de uso que lleva acompañándome.

Este objetivo es ideal para callejear con baja luz y poder hacer fotos a pulso sin usar trípode

Irix 21mm f/1.4: Características

Focal

Lo primero que veo en un objetivo es su focal. Los números siempre me han atraído. Las mates no tanto, pero bueno eso es otra historia. Ya hemos hablado muchas veces sobre que si queremos tener objetivos de alta calidad y sin arruinarnos debemos optar por ópticas de focal fija. Por eso, desde hace mucho tiempo, casi todas mis lentes lo son. En este caso la focal de 21mm os puede parecer extraña pero no lo es. Se sitúa prácticamente en el centro del “universo angular”.

Con esta focal “matamos muchos pájaros de un tiro” porque ofrece un ángulo de visión muy grande sin distorsión geométrica de la perspectiva. A esto hay que unir el gran trabajo que ha hecho Irix con el modelo óptico. Pero eso lo dejaremos para después. Como ya os conté en un artículo muy interesante en este blog, usar grandes angulares presentan varios problemas compositivos. Echadle una lectura y así no me repito.

Contamos con un gran campo de visión pero al mismo tiempo los objetos no nos aparecerán muy alejados del primer plano

Uno de los problemas compositivos al usar un gran angular es que, si no tenemos un elemento de interés en un primer plano, todo queda relativamente lejos y nuestra fotografía pierde fuerza. La focal de 21mm soluciona bastante este problema, porque aún teniendo una gran cantidad de campo de visión, no aleja tanto a los objetos y es más sencillo componer. En definitiva, tenemos las ventajas de un amplio gran angular sin algunos de sus inconvenientes.

Es un un gran angular perfecto para paisajes y arquitectura, sin grandes transformaciones geométricas propias de estas focales

Apertura de diafragma

Lo segundo que miro en un objetivo es que apertura máxima tiene. En este caso, fue lo que prácticamente decidió la adquisición de esta lente. Además, porque sé que de calidad, siendo de Irix, íbamos a ir sobrados.

La nitidez a máxima apertura es magnífica tanto en el centro como en las esquinas. Esta foto es un recorte y se puede apreciar perfectamente todos los detalles del girasol

Cuando vi que este objetivo iba a salir con un f/1.4 sentí palpitar la neurona que suelo dejar libre (realmente solo tengo esa, pero trabaja en multitarea) para la fotografía. Las posibilidades que te ofrece un objetivo con esa apertura de diafragma son muchas. Como he comentado anteriormente, después veremos las necesidades que cubre.

La profundidad de campo es muy reducida lo que permite centrarse en los detalles importantes

Pero a estas alturas, todos sabemos qué ventajas tenemos con una gran apertura. Como digo siempre, cerrar siempre se puede cerrar hasta más allá de dónde vamos a necesitar. Pero un f/1.4 es mucho, y eso es muy bueno, por si algunos teníais dudas.

Me permite hacer fotografías de retratos, con toda la ambientación. Adriana la mayor fan de la Formula 1 y de  Kimi

Construcción

Una vez visto la focal y el diafragma, entraremos en los aspectos constructivos del objetivo. Con una palabra casi tenemos listo este apartado: Solidez. Como el artículo me lo pagan por palabras, ahora es cuando pongo el “emoticono” de la carita guiñando un ojo. Me voy a explayar un poquito más. Cuando tomas el objetivo entre las manos notas el peso y constatas su construcción, en gran parte metálica. Muchos piensan que ese es el hecho que hace que estos objetivos sean más pesados, pero se equivocan. Lo que hace que éstos pesen “un poquito” es el tamaño y contundencia de las lentes que incluyen en su interior.

Es increíble al trabajo que hace Irix con sus lentes. Tenemos una definición y nitidez increíble. Podemos hacer fotos con luces frontales y no perdemos calidad. Incluso con cámaras con decenas de megapíxeles. Su focal también es muy interesante para el uso en panorámicas

Irix 21mm f/1.4: Lentes internas

Estos objetivos están fabricados con lentes de la máxima calidad (asféricos, de ultra-baja dispersión, etc.) que hacen que su rendimiento óptico sea magnífico, garantizando la máxima nitidez y las mínimas distorsiones. A cambio, aumenta un poco el peso de la lente. Pero ojo, nos nos confundamos, que hablamos de “tan solo” 800 gramos. El cuerpo está perfectamente sellado, lo que te va a permitir trabajar en todas las situaciones ambientales que te puedas encontrar, tanto de lluvia como de polvo.

Un objetivo magníficamente construido. Lo uso en mi Sony A7R3 a través de un adaptador. Como el objetivo es de enfoque manual solo necesita un adaptador con control de diafragma. El control de foco, evidentemente, no es necesario

La tapa en este objetivo Irix 21mm f/1.4

Lo siguiente que notas es el tipo de tapa que lleva. Sin abrirla ya sabes lo que vas a descubrir debajo: Una lente convexa. Pero lo que sorprende es el sistema que han desarrollado en Irix para poder contar con un parasol desmontable y, al mismo tiempo, proteger la lente. En la foto se ve muy bien, de hecho una imagen vale mil palabras. Pero me acabo de acordar que me pagan por estas, así que lo voy a explicar. El parasol es totalmente desmontable con el típico giro más clic de todos. Pero este parasol se engancha en una especie de “miniparsol” de apenas un centímetro que sobresale del borde del cuerpo de la lente y que protege la parte más externa de ésta. Esto también presenta un aspecto negativo, pero lo comentaremos después.

El anillo de enfoque es muy preciso y te permite un control total del punto de enfoque. Ideal teniendo en cuenta la mínima profundidad de campo que vamos a tener a las máximas aperturas

Anillo de enfoque

Siguiendo con los elementos constructivos, tenemos el gran anillo de enfoque, con un acabado sensacional característico de los modelos Dragonfly de Irix y con un recorrido que me ha parecido muy bueno, ni muy corto, ni exageradamente largo. Pero, sobre todo, con tacto suave y agradable. Lleva grabadas las distancias de enfoque tanto en pies como en metros. Son reflectantes a la luz ultravioleta para cuando hacemos fotos nocturnas.

He echado de menos las marcas de hiperfocal que tienen tanto el Irix 15mm f/2.4 como el Irix 11mm f/4.0. Pero entiendo que para un objetivo con tanta apertura la cosa se complica. Por encima del anillo de enfoque tenemos el típico anillo de Irix que permite bloquear el enfoque, ideal en muchas situaciones. Siguiendo con el tema del enfoque, vemos que todo el movimiento de lentes se produce en el interior del objetivo lo que garantiza el sellado del que ya hemos hablado.

Aún no lo he probado en situaciones extremas, pero de momento, sí he probado otros objetivos de la grama Dragonfly de Irix y, por experiencia, mi confianza es total

Diafragma en el Irix 21mm f/1.4

A través de sus cristales podemos observar un diafragma totalmente circular y con un total de nada más y nada menos que de 11 hojas, lo que nos va a garantizar unos desenfoques muy suaves y orgánicos. Los desenfoques llamados “bokeh” y unas “sunstar” de muchísimas puntas (22) que hacen que luzcan espectaculares.

Me encantan las “sunstar” que el objetivo produce. Están bien definidas y son fáciles de conseguir

Montura metálica

Finalmente, me gustaría comentar su montura metálica con “pines electrónicos” de conexión que permiten una comunicación total con la cámara, además del uso de los modos semiautomáticos y la transmisión de datos EXIF. La montura está disponible para Canon, Nikon y Pentax. En mi caso uso la montura de Canon o bien en mi antigua 6D o a través de un adaptador en mi sony A7R3 con la que va perfecta.

Como veis, en todas las imágenes de este artículo aparecen perfectamente indicados los datos EXIF. También podéis comprobar en esta foto lo “recto” que es este objetivo en todas las líneas

En definitiva, un objetivo construido pensando en los cánones más altos de calidad, hecho para durar y que permite un cómodo y agradable uso bajo cualquier circunstancia.

Irix 21mm f/1.4: Usos

Una vez explicado cómo es el objetivo, es hora de hablar de su uso. Por qué creo que este objetivo es ideal y por qué he pensado que debe formar parte de mi “selecto” parque de lentes. Sólo llevo un mes usándolo, por tanto los resultados no son definitivos, pero por lo que ya llevo hecho, creo que mis “pensamientos” van por buen camino y que no me he equivocado.

La versatilidad de esta lente permite, no solo hacer fotos de paisaje, sino también fotografía de producto. Jugando con la focal y la apertura de diafragma se pueden conseguir resultados interesantísimos

Incluso nos podremos adentrar en la fotografía macro-gran angular con ayuda de un simple anillo de extensión de 10mm

Fotografía de paisajes en general

Esto es evidente. Es un gran angular, sin ser extremo, pero que permite un espectacular campo de visión de 90 grados, sin distorsiones de ningún tipo.

Todas las líneas rectas, con definición y nitidez. Resistencia al “Flare”. Ángulo de visión de 90 grados. Hará las delicias de los fotógrafos de paisajes y de arquitectura

Con una calidad óptica brutal, con una rabiosa nitidez que aprovecha perfectamente su gran apertura. Además, cuenta con sus 11 hojas en su diafragma para renderizar unas imágenes con gran bokeh. ¿Esto quiere decir que si quiero comprar un objetivo de paisaje me tengo que comprar este? ¿A quién quieres más, a papá o a mamá? Pero déjame acabar el artículo para llegar a las conclusiones, no nos precipitemos.

Me encanta el bokeh que realiza esta óptica

Fotografía angular en interiores con poca luz

Si, en muchas ocasiones nos vemos necesitados de usar un objetivo luminoso en interiores. Solemos contar con nuestro 50mm, que normalmente son los objetivos luminosos más accesibles. Pero la mitad de las veces se nos va muy largo de focal en una cámara con sensor Full Frame. Y esto es aún mayor con un sensor APS-C, y más si tenemos que hacer fotos en casas modernas donde las habitaciones son especialmente reducidas.

Cuando me dedicaba a la fotografía social y tenía que hacer una foto de grupo en casa de la familia de los novios, he tenido que salirme, literalmente, y hacer la foto a través de una ventana. Con este Irix 21mm f/1.4 tengo garantías de que, si necesito hacer fotos a un grupo de personas en interior y con poca luz, tengo la situación controlada y sin necesidad de instalar flashes ni nada. Que también los llevo, pero solo los uso cuando son estrictamente necesarios. Y con este objetivo, las ocasiones van a ser menos.

Fotografía callejera

Sí, me gusta la fotografía de calle gran angular. El poder contar con un objetivo luminoso me ayuda sobre todo cuando cae la noche. Además, no te hace falta llevarte la cámara al ojo para encuadrar porque con 21mm y situando la cámara a la altura del pecho puedes hacer perfectamente la foto y tener todo encuadrado sin problemas. Y como cuentas con las marcas de medición del enfoque de gran exactitud, tan solo tengo que seleccionar la distancia de enfoque y hacer la foto con el diafragma que necesito. Al principio puede parecer complejo, pero cuando lo haces un par de veces te das cuenta de que funciona realmente bien.

Es ideal para fotos de calle donde te interesa meter en la foto todo lo que ocurre. Con la cámara colgada al cuello es muy sencillo hacer encuadres casi perfectos sin tener que llevarte la cámara al ojo

Además, y de esto quizás podríamos escribir un artículo completo, a mí personalmente me gusta pasar desapercibido cuando hago fotos callejeras. No porque quiera que no me vea la gente haciéndoles fotos, sino porque cuando ven que las hago, dejan de hacer lo que están haciendo, y precisamente es lo que no quiero. Es para abrir debate, pero con un cuerpo Full Frame y con una lente de tamaño medio, uno no pasa desapercibido. Cuando, además, te llevas la cámara al ojo, pues… Ahora, si llevas la cámara colgada, no necesitas llevarte la cámara al ojo para hacer la foto… En fin, no sigo, que aunque me paguen por palabras, a buen entendedor…

Fotografías nocturnas

Y, por supuesto, llegamos al punto culminante: la foto nocturna y de cielos estrellados. Contar con una apertura de f/1.4 nos va a permitir captar una gran cantidad de luz y poder reducir la ISO de nuestros equipos y así bajar el ruido. Esto, combinado al gran ángulo de visión, nos ayudará a captar unos cielos amplios y lleno de estrellas. Al mismo tiempo, podremos añadir elementos en primer plano para completar la composición, dotando a nuestras fotografías de un gran impacto visual. Además, al contar con unas ópticas de gran calidad y nitidez, nos va generar una imagen espectacular, sin ningún tipo de aberración, y con una renderización y detalle del color sin parangón.

Poder disparar a aperturas de f/1.4 ayuda a disparar con ISOS bajos y tiempo de exposición muy cortos. Incluso en lugares donde la contaminación lumínica es bastante alta conseguimos resultados muy buenos

Muchas veces no echamos cuentas a estos aspectos. Pero en fotografías nocturnas de cielos estrellados, que son situaciones de máximas exigencias, tanto de la cámara como de las ópticas, es esencial disponer de lentes de la mayor calidad. Por ello cuento con los objetivos Irix, porque el resultado final varía mucho: nitidez y claridad, ausencia de aberraciones, renderizado del color, transiciones y degradados tonales suaves, y muchos otros factores, que con lentes “normales” ¡como que no! Pero no me extiendo más porque próximamente publicaremos un artículo completo sobre las fotografías nocturnas con este Irix 21mm f/1.4.

Irix 21mm f/1.4: Conclusiones

Pienso que he acertado totalmente con la compra de este objetivo. Cada día que lo uso y veo las fotos que hago con él, estoy más satisfecho. ¿Recomendaría este objetivo a todo el mundo? Un rotundo sí. Pero, y siempre hay un pero, debes de tener en cuenta que esta lente no puede montar filtros convencionales circulares (como ND o polarizadores) y de momento no hay adaptadores para filtros cuadrados (degradados, etc).

Ahora mismo, la única posibilidad para usar algún tipo de filtro ND es usar filtros que van acoplados al sensor. Espero que próximamente haya algún tipo de soporte de filtros para esta lente. Pero, de momento, solamente podemos recurrir a estos recursos, como en esta foto donde he usado un filtro Clip ND1000

Esto es necesario tenerlo en cuenta. Si soy un fotógrafo que uso constantemente filtros ópticos seguramente preferiría el Irix 15mm f/2.4 que puede montar filtros circulares y portafiltros para filtros degradados. De hecho el Portafiltros Irix Edge IFH-100-PRO es ideal con su polarizador incluido. Eso sí, pierdo casi dos pasos de apertura y todo lo que supone.

También puedes recurrir a trucos de edición como la típica suma promediada de exposiciones. Si os interesa podemos hacer algún tutorial al respecto

Por eso os decía antes, “¿a quién quieres más a papá o a mamá?”: Ambos objetivos presentan una calidad óptica similar por lo extraordinario. Si no tienes ningún gran angular, incluso si ya lo tienes, cualquiera de estos dos sería más que recomendable. Especialmente el Irix 21mm f/1.4 para aquellos que son entusiastas de la fotografía nocturna o  que no usan o no van a necesitar filtros y prefieren tener un gran angular un poco más cerrado para componer de forma más fácil, porque no queda todo tan lejos. Un objetivo magnifico, una gran compra.