Fotografiar cascadas impactantes con estos 10 consejos

Probablemente estarás harto de ver en revistas fotos de ensueño. Fotos donde se muestran paisajes idílicos. Y, entre todos ellos, muchos de cascadas, que en muchas ocasiones no logras saber cómo se han podido realizar. Pues quédate por aquí y te cuento cómo fotografiar cascadas fantásticas con solo 10 consejos.

Fotografiar cascadas impactantes con estos 10 consejos

Es uno de los lugares que más buscamos los fotógrafos de naturaleza, fotografiar cascadas en entornos únicos.

Aparentemente esa cascada que a simple vista nos parece preciosa y que envuelta por el sonido del  agua nos hace integrarnos, y formar parte de la naturaleza, nos invita a sacar la cámara para inmortalizar ese fantástico momento y poder tener para siempre esas sensaciones. Es en ese momento cuando nos damos cuenta que, al realizar la fotografía, la imagen que hemos tomado no representa aquello tan fantástico que nuestros ojos y sentidos perciben.

Pero vamos a intentar que con estos 10 consejos, fotografiar cascadas que te atraigan tanto como las de los grandes fotógrafos. Y, además, disfrutes al máximo realizándolas.

1. Ten en cuenta el entorno

Uno de los primeros consejos que suelo dar a la hora de fotografiar cascadas es no precipitarnos en realizar la toma. Hay que dedicarle tiempo e intentar componer con los elementos que la rodean. Si, por el contrario, queremos hacer una abstracción de la cascada capturando solo el agua golpeando en las piedras o buscando las texturas que nos da el agua en su caída,  hay que aplicar una buena composición.

El entorno que rodea una cascada es tanto o más importante que la misma. Y por eso tenemos que observar y jugar con los elementos. Saber dónde situarnos para que la imagen que vayamos a obtener nos muestre todo el potencial de la cascada.

2. Protege tu equipo del agua al fotografiar cascadas

Como todos sabemos, el agua y nuestro equipo fotográfico no son los mejores amigos. Pero teniendo precaución y sabiendo hasta donde podemos llegar, todo es posible. Últimamente, tanto los fabricantes de lentes como de cámaras están haciendo esfuerzos para que sus cierres y partes móviles sean más estancos, para que el agua y la humedad no puedan entrar.

Normalmente las zonas en las que trabajaremos para fotografiar cascadas suelen ser superficies resbaladizas. Por eso es recomendable usar calzado que nos asegure un buen agarre y no tengamos sustos o caídas.

Para conseguir fotografiar cascadas increíbles, en muchas ocasiones tenemos que arriesgar y meternos en el agua con el trípode y todo el material que llevamos en la mochila. Y aunque muchos equipos resisten salpicaduras, aún no tenemos ninguno sumergible, por eso recordar que toda precaución es poca.

3.  Cuida la luz al fotografiar cascadas

La importancia de la luz es una de las normas más importantes en cualquier rama de la fotografía. Y para fotografiar cascadas es vital, ya que la fuente de luz natural que tenemos es el sol y las luces directas nos van a producir sombras duras, flares y destellos, que en muchas ocasiones, nos pueden arruinar la toma.

Por eso intentaremos buscar luces suaves, como atardeceres o amaneceres en las que las altas luces no nos jueguen malas pasadas. Si tenemos días de nieblas o nublados podemos disfrutar toda la jornada pudiendo conseguir efectos oníricos que darán significados distintos a tu imagen.

4. Trabaja con objetivos gran angular

Los objetivos gran angular nos van a proporcionar una visión generalizada de la cascada y sus elementos. Por eso es la lente que recomiendo para este tipo de lugares.

Objetivos gran angular como el Irix 15mm f/2.4 que, con su ausencia de distorsión, su gran nitidez en el enfoque y con la facilidad de obtener la hiperfocal en un solo movimiento hasta su marca en el anillo de enfoque, sumado a sus inexistentes aberraciones cromáticas, la hacen una de las mejores lentes  para este tipo de situaciones. Tanto para Full Frame (FX) como para cámaras con factor de recorte (DX).

Si quieres saber más sobre las marcas de profundidad de campo e hiperfocal en objetivos Irix no te pierdas este artículo.

Este objetivo, además, hace muy cómodo fotografiar cascadas gracias al portafiltros Irix. Ya que, en una lente ultra gran angular como esta podemos trabajar con filtros de 100mm y a la vez, colocar un filtro polarizador. Lo que lo convierte en un objetivo muy cómodo en situaciones donde la movilidad se nos complica al estar dentro del agua.

5. Sal de tu zona de confort para fotografiar cascadas

Muchas veces los fotógrafos nombramos la dichosa frase de “salir de la zona de confort”. Y así es, para fotografiar cascadas hay que salir de la foto típica y de ese lugar donde es más cómodo fotografiar, ya sea desde el mirador donde paramos todos o desde la zona más turística. Si quieres conseguir una fotografía distinta y única, eres tú quien debe hacerla única.

Cambiar de ángulo, contrapicar o cambiar el tipo de disparo alargando la exposición van a hacer que tu fotografía sea distinta a todas las demás.

6. Trabaja con ropa adecuada

Uno de los consejos que doy siempre es llevar botas de agua o vadeador. El disfrute que se obtiene al fotografiar cascadas con vadeador se multiplica al poder componer donde quieras y poder elegir la escena.

El punto de vista es completamente distinto al que normalmente tenemos desde tierra y verás que tu fotografía va a conseguir superar a todas las que has realizado antes.

7. Escoge la velocidad de obturación para obtener efectos creativos

Como el principal motivo al que vamos a disparar es el agua que está en movimiento, tenemos el poder de trabajar la fotografía como queramos.

Podemos componer dejando el agua congelada con velocidades de obturación de más de un 1/150, que en un gran angular nos dejará absolutamente todo congelado. Es la técnica más sencilla, medir la luz con la referencia de no bajar la velocidad y tan solo pulsar el botón.

Yo personalmente, prefiero fotografías de larga exposición. Pueden ir desde 1 segundo hasta 30 segundos o muchos minutos, dependiendo de las condiciones de luz y los filtros de densidad neutra que usemos.

El agua a partir de 3 a 4 segundos suele dar el mismo resultado que si expones 30 minutos. La textura o el agua seda va a ser la misma. Donde sí notaremos variación en el tiempo de exposición si lo alargamos, es en los elementos que floten en el agua, como ramas, hojas etc… Normalmente terminan dibujando una espiral debido a la corriente.

Si quieres saber cómo se consigue el efecto seda en el agua, échale un vistazo a este artículo.

8. Selecciona tu equipo de trabajo para fotografiar cascadas

En el punto anterior hemos hablado de alargar la exposición, y para ello quiero hablaros del material que vamos a necesitar para fotografiar cascadas con larga exposición.

La fotografía de paisaje va ligada al trípode en la mayoría de los casos, es el principal elemento que vamos a necesitar después de nuestra cámara y el objetivo.

El trípode nos va a ayudar a cerrar el diafragma todo lo que necesitemos para tenerlo todo completamente enfocado. Escoge un trípode firme y estable, lo recomendable es diafragmar entre f/11 y f/18, el trípode también nos va a permitir trabajar con valores ISOS bajos, entre 100 a 200 ISO y así, poder bajar la velocidad de obturación por debajo de 1 segundo teniendo una gran calidad en la imagen y consiguiendo el efecto de movimiento o seda en el agua.

Con este tiempo ya veremos una fotografía completamente distinta, mucho más dinámica y que nos dará sensaciones de fuerza dejando líneas contrastadas con exposiciones de 1 a 3 segundos, o sensación de calma dejando la exposición a  30 segundos o más, convirtiendo el agua en seda.

9. Alíate con filtros ND

Uno de los elementos que más vamos a usar en este tipo de fotografía son los filtros ND o densidad neutra, los recomendables son filtros de 6 (ND100 1.8) o 10 (ND1000 3.0) pasos, que nos harán reducir la luz que entra a nuestro sensor y poder obtener una exposición correcta con un tiempo de exposición mayor. Si quieres aprender a usar los filtros graduales para conseguir fotografías de paisaje increíbles, échale un vistazo a este artículo.

Hoy en día hay filtros de cristal de muy alta calidad y que no alteran los tonos de la imagen dando una toma neutra que será lo más fiel posible con respecto a lo que ven nuestros ojos. Al tratarse de agua, otro filtro que recomiendo y que usamos mucho, es el filtro polarizador.

Es un filtro que nos va a dar muchas alegrías, puesto que nos da un mejor contraste y saturación a la escena, pero principalmente su función es evitar los reflejos de superficies brillantes como metales, cristales o en este caso el agua.

Este cristal está construido mediante láminas que polarizan la luz que incide en nuestra lente. Como la luz no viene siempre desde el mismo lugar, somos nosotros los que tenemos que girar este filtro hasta conseguir el resultado deseado.

Tenemos dos tipos de filtros. Los lineales, que nos permiten poder acoplarlo al portafiltros, pero que nos puede ocasionar inconvenientes si tenemos posicionado al mismo tiempo el  filtro degradado. Moviendo el polarizador se nos moverá  al mismo tiempo el filtro degradado con el que trabajamos, y también nos ocupara  una ranura de las guías del porta filtros.

Filtros Polarizadores CPL

También tenemos filtros circulares polarizados (CPL), este tipo de filtro nos permite poder girarlo sobre sí mismo y polarizar la luz de una forma más sencilla ya que no afecta a las ranuras de los filtros y a los filtros degradados.

10. Ten en cuenta el revelado final

Y por último trabajar un buen revelado jugando con las luces y sombras de la escena, nos van a dar seguro una imagen tan impactante como las que solemos ver en tantas publicaciones de naturaleza.

Recuerda que puedes compartir tus fotografías de cascadas con nosotros a través de nuestro blog o nuestras redes sociales. ¿Tienes algún truco para hacer fotografías de cascadas? ¡Compártelo con nosotros! 🙂